Soñar es de las mejores cosas que podemos hacer en la vida, tal vez es de las muy pocas cosas que no nos roban. A través de los sueños desarrollamos nuestra creatividad y esto nos da la energía o el combustible para hacer cambios importantes, vivir mejor, disminuir el estrés, fortalecer mis capacidades, creer en nosotros mismos.
Pregúntate ¿hace cuánto no sueñas? ¿Cuándo fue la última vez que te emocionaste soñando? ¿Alguien castró tu capacidad de soñar? Tal vez hoy, haces parte del sueño de otros, o envidias lo que otros si se han atrevido hacer, y es acá donde aparece la frase ¿por qué ellos sí pudieron?
En algún momento abandonaste un sueño por alguna de las siguientes razones:
✓ Todas tus ideas eran descabelladas
✓ Lo veías inalcanzable
✓ Era más factible para otros que para ti
✓ Podía costar mucho tiempo y dinero
✓ Te podrían criticar diciendo que estabas “loco”
✓ Se veía muy lejano y lo querías pronto.
✓ Nadie te ayudó o te apoyó,
✓ Nadie creyó en tí
Lo anteriormente planteado, es una lista sistemática de puras excusas, y aplazamientos, que enmascaran tus miedos. No esperes a que estos desaparezcan para dar el primer paso, o tener los recursos suficientes, podrías quedarte toda la vida esperando el momento propicio.